la interseccion entre psicologia y tech

(CCBT) Terapia Cognitivo-Conductual en aplicaciones web

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Bienestar Digital

CCBT: computerized coductual behavioral therapy.

Entre el chat y la terapia

«¿Realmente funcionan las aplicaciones de salud mental?» y «¿Cómo se maneja lo impersonal de una videollamada?»
Estas fueron las primeras preguntas que un consultante me hizo al comenzar su proceso. Preguntas completamente válidas, por cierto. Le respondí desde la experiencia clínica, con calma y claridad, y eso bastó para que pudiéramos avanzar. Pero confieso que algo de esas inquietudes se me quedó resonando.

No era la primera vez que alguien traía estos temas a la sesión. Cada vez más personas se preguntan si la tecnología puede realmente sostener un espacio terapéutico. Y yo también, como profesional, me lo he preguntado. Así que decidí ir un poco más allá: buscar qué dice la investigación científica sobre la efectividad de la terapia digital. Quería contrastar mi experiencia con evidencia sólida y actual. Esto es lo que encontré.

Comencé con algunos pioneros en este campo (como Selmi, Klein o Greist), quienes demostraron que un ordenador podía ser más que una herramienta; podía ser un aliado terapéutico. Posteriormente, llegaron programas como Beating the Blues y Good Days Ahead quienes mostraron que esta modalidad no solo era viable, sino que también efectiva.

¿Resultados? Mixtos, pero esperanzadores. Mientras que algunos estudios demostraron mejoras significativas frente al tratamiento habitual, otros encontraron resultados más discretos. ¿La clave en todos? El soporte clínico.

Cuando se ofrece acompañamiento profesional junto con la aplicación web que ofrece CBT, aunque este acompañamiento sea mínimo, los resultados son comparables a los de la TCC tradicional, tal como mostró Wright et al. en 2005 y luego en 2014. Los beneficios son claros: menor tiempo del terapeuta, costos reducidos, y aún así, resultados significativos.

Un metaanálisis de Andrews et al. (2010) refuerza esta idea: la CCBT con soporte clínico tiene evidencia sólida. Y otras revisiones (Richards & Richardson, 2012; Thase et al., 2014) insisten en que el componente humano, incluso breve, es esencial para la efectividad del tratamiento. (les dejo la investigación y la web en el pie de página)

Autoayuda basada en la web

La accesibilidad de las plataformas de autoayuda online las hace atractivas, pero sin guía profesional, la adherencia es baja. Spurgeon & Wright (2010) y Eysenbach (2004) identificaron tasas de abandono significativas en programas sin soporte. En contraste, los programas con acompañamiento clínico muestran un mayor compromiso y eficacia.

Un estudio interesante es el de Birney et al. (2016) sobre MoodHacker, (Hablaremos un poco mas de esto en un siguiente post) que integró acceso a profesionales de salud mental del trabajo. El resultado: mejoras más claras y sostenidas. Titov (2011) también señaló que las intervenciones de baja intensidad con algo de guía son notablemente más efectivas.

Eso sí, no todo lo online es lo mismo, ya que también hallaron diferencias importantes entre plataformas en cuanto a usabilidad, accesibilidad y respaldo científico. De ahí la necesidad de elegir cuidadosamente y no dejarse llevar solo por el diseño atractivo.

El soporte humano sigue siendo el factor diferencial. La evidencia apunta a que la guía, incluso breve, mejora notablemente la eficacia y la continuidad del tratamiento. La depresión, sobre todo en su forma clínica, requiere más que buenos módulos interactivos; necesita conexión, seguimiento y contención.

Especialmente la CCBT con apoyo clínico— tiene el potencial de transformar el acceso al tratamiento, especialmente en contextos donde hay escasez de profesionales o barreras para acudir presencialmente.

No se trata de reemplazar la psicoterapia tradicional, sino de complementarla. De abrir nuevas puertas. De brindar opciones. Y sobre todo, de entender que el cambio cognitivo y conductual también puede ocurrir frente a una pantalla, siempre que haya una mano profesional guiando desde el otro lado.

¿Y tú? ¿Has tenido estas dudas con respecto al uso de la tecnología para la salud mental? ¿Confiarías solo en un programa online para mejorar tu salud mental?

Bibliografia: Wright, J. H., Owen, J. J., Richards, D., Eells, T. D., Richardson, T., Brown, G. K., ... & Thase, M. E. (2019). Computer-assisted cognitive-behavior therapy for depression: A systematic review and meta-analysis. Journal of Clinical Psychiatry, 80(2), 18r12188. https://doi.org/10.4088/JCP.18r12188

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